sábado, 30 de septiembre de 2017

Ocupar una propiedad privada es un delito, dar casas a cambio de dinero, también.

La Constitución dice que todo el mundo tiene derecho a una vivienda digna, quizás este derecho fundamental podría valer para hacer la misma equiparación que hizo Caballas ( Podemos), a la hora de no dar por válido el discurso de la no legalidad del referéndum de Cataluña de este Sábado, porque quisieron compararlo con el hecho de que durante un tiempo la esclavitud o el que las mujeres no votaran estaban dentro de lo legal, pero era injusto. Como injusto es que los catalanes no tengan derecho a decidir, aunque este derecho lo hayan obtenido con un similar golpe de estado. 
Evidentemente, aunque tuvieran derecho a decidir, tienen que lograr esta causa dentro de los parámetros recogidos en un sistema democrático, igual que la mujer consiguió votar o se acabó por fin con parte de la esclavitud, dentro de ese mismo sistema democrático. 
Los avances se hacen a través del diálogo, de la Ley,  de las Cortes, con sentido de Estado. 
Pues bien, siguiendo con el principio y con la predisposición a entender que todas las personas deben de tener un techo, es inaceptable que quieran conseguirlo a costa de usurpar una propiedad privada. Ese derecho lo tienen que lograr dentro de la Ley y con las herramientas que disponemos en nuestro sistema. Todo el mundo sabe que invadir una vivienda vacía es un delito penal contra el que hay que luchar.
Dicho esto, a nadie le puede extrañar que hayamos llegado hasta aquí. ¿De verdad nos ha sorprendido?
Ceuta ha estallado por culpa de un Gobierno que no ha sabido gestionar la política de vivienda. Un Gobierno que ha permitido la construcción irregular, sin un plan de ordenación urbana con lógica. Un Gobierno que no tiene un auténtico reglamento de alojamiento alternativo para casos da urgencias, no solo con los desahuciados, también para quienes tienen sus casas en ruina. Un Gobierno que prefiere invertir en el Revellin que en liberar suelos para la construcción de viviendas públicas o lo más grave, un Gobierno que ha dado casas sin baremar a cambio de dinero, o con nombres y apellidos, mientras familias enteras, y muy necesitadas, han visto como nunca llegaba su oportunidad.
Ahora hay que asumir las consecuencias de la ineficacia y la ineptitud de un Presidente que ya no da más de si. De un Presidente que debe de ser historia para dejar que otro partido haga de verdad historia, pero no una historia de patriotismo y banderas, sino una historia marcada por lo social y por la igualdad

domingo, 24 de septiembre de 2017

"PAREMOS EL 1 DE OCTUBRE HASTA EL DÍA 2".


Vaya por delante que soy una fiel defensora de la identidad y el sentimiento territorial. Vaya por delante que sé que durante estos años ha existido una inutilidad por parte del Gobierno, a la hora de afrontar la cuestión de Cataluña, que ha pasado factura. Un Gobierno que ha impuesto un criterio y ha dado la espalda a una realidad y a una muerte anunciada. 
Y vaya por delante que, desde mi conceptualización federalista y no independentista, creo en el derecho a decidir. Pero un derecho que tiene que estar sujeto dentro de los parámetros democráticos, desde la Constitución, desde la Ley.
Este referéndum es ilegal y, como tal, ahora toca hacer un ejercicio de responsabilidad en un momento crucial para la unidad de España. El 1 de octubre no se puede convertir en el no a Rajoy, ni en una partida electoralista. El 1 de octubre tampoco se puede convertir en la salida de los inconformistas.
España está en juego, pero más que España está en juego la cohesión y el entendimiento. 
Ahora mismo toca hacer política y dejar atrás un callejón sin salida de varias esquinas, los que quieren votar si o sí, los que usan este escenario para atacar al Gobierno, o los que únicamente hablan de diálogo, cuando esto último ya lo tenemos claro. 
Yo no tengo la solución. Creo que en estos momentos nadie la tiene. Tampoco me veo preparada para exponer una idea desde la distancia, pero sí tengo la capacidad para insistir en este breve espacio de tiempo en el pensamiento de que el sentido común a veces libera muchos más conflictos, que cualquier otra herramienta . Y mi sentido común me lleva a recordar la frase de Eduardo Madina cuando dijo que a él no le emocionaba las banderas nacionales sino las banderas sociales. 
Y es que, creo que se está engañando a cierta parte de la población que quiere la independencia y se está mezclando lo económico con el valor sentimental. 
Tocar en el corazón es muy fácil, lo difícil es justificar esa salida y ser trasparente con las consecuencias. Y dentro de esa transparencia quiero a los partidos unidos. Quiero a un PSOE liderando esa batalla, como siempre lo ha hecho, y razonando en la línea de la protección del Estado, no es su rotura.
Unidad, porque como también dijo la gran Chacón   - “No hay futuro para Cataluña en el enfrentamiento, en la división o en la fractura”. Y en esa unidad también quiero mencionar una reflexión de Rubalcaba cuando expuso que  “cumplir las leyes es un principio democrático inexcusable. El primer principio democrático. Las leyes no son inmutables, claro que no. Bien lo sabemos aquí. Pero su cumplimiento es en una democracia es ineludible. Leyes que, entre otras cosas, dan poder a quienes no tienen ningún otro poder, que protegen los derechos de quienes no tienen otra forma de protegerlos. Eso es algo que la izquierda nunca puede olvidar”. Y el 1 de octubre no está sujeto a la Ley, ni siquiera a la tolerancia. Paremos esto. 

miércoles, 20 de septiembre de 2017

EN LA SUELA DE SUS ZAPATOS ( 2º parte del Congreso del PSOE de Ceuta)


A veces, me pregunto el motivo que hace que sienta tantas ganas de sacar lo que tengo en mí, aumentando el número de mis enemistades, si ha quedado demostrado que no tengo ningún interés personal en sacar rédito político, aunque durante mucho tiempo se hayan empeñado en hacer ver que mi único interés era la Secretaría General, cuando es más que conocido el hecho de que yo siempre haya querido que ésta sea ocupada por una persona con nombre “y apellidos”. 
Soy socialista porque defiendo las injusticias, el día que deje de hacerlo cogeré mi carnet y lo romperé. Y en esta defensa de lo ético, de lo coherente, de la dignidad, está el denunciar todo lo que hemos estado sufriendo durante estos años, por culpa de un narcisismo político peligroso.  
Ya describí en qué ha convertido durante estos años, Manuel Hernández, la casa socialista, pero jamás pensé que su nepotismo llegaría tan lejos en un Congreso hecho a conciencia y sin ningún tipo de miramientos y estupor. 
Que tenga la moral de decir que ha conseguido abrir el partido y doblar el número de la militancia es tan mezquino como sórdido, sobre todo porque con esa afirmación está enterrando el esfuerzo y el trabajo de otros años, de otras personas, de otra época. Por cierto, una época en la que él participó. Aún recuerdo su entrega socialista y su amor a las siglas cuando no se lograron los cinco escaños, como daban las encuestas, y salió pitando de la sede sin tener la gentileza de hacer unas declaraciones a los medios de comunicación, que se las perdieron. Se limitó a decir que no, dejándonos a nosotros solos ante una situación que entendía que era colectiva y de equipo. 
Ahora, y después de fulminar a quien quiso concurrir en unas Primarias recientemente contra él, inventándose unos plazos ilegítimos y aprobando un calendario sin quórum, se permite el lujo de divagar en esa ensoñación mental sobre, como estaba diciendo, con el numero de afiliados y afiliadas. 
¿Aumentar el censo a costa de lo que sea y como sea? No voy a repetir la jugada de TRACE, jugada que Pedro Sánchez equivocadamente no quiere ver y que tantas veces he hecho pública, pero sí voy a juzgar la formula mercenaria de captar a personas de otro partido, en este caso de UPyD,  a cambio de un puesto en la ejecutiva. ¿Tan poco vale nuestras siglas? ¿No hay nadie en el partido que sea capaz de llevar Sanidad, que lo tiene que buscar en otro sitio? ¿A nadie se le ha pasado por la cabeza que puede haber más casos de militantes con doble afiliación o votantes del Partido Popular o de Caballas? Este último lo nombro por el acuerdo llegado en la Asamblea, al primero porque tengo constancia de ello. 
Ademas, todo esto es mucho más grave de lo que parece al confirmar esta persona, José David García, que firmó una ficha en el PSOE por presión y que nunca dijo que dejaría UPyD, por lo que entiende que jamás se pudo haber tramitado. ¿De verdad cree que esto es un juego? ¿Si hace esto internamente y orgánicamente dentro de nuestro propio partido, alguien me garantiza que no hará nada extraño a niveles mayores? Entiendo que no, por eso es lícito que exija una explicación mayor que la simple frase " deja la Secretaría de Sanidad por motivos personales".   
El PSOE no se merece que un integrante de otro partido, Julián Muñoz, hable de las prácticas dañinas de los partidos mayoritarios, cuando siempre hemos sido impecables. 
Y ahora vamos con la otra pare, Manuel Hernández cree que somos personas indoctas, que no analizamos la extrañeza que nos produce ver que alguien que afirma que ha abierto las puertas del PSOE, para contar con el talento y con la ciudadanía, ha metido en los órganos de dirección a su familia y a la familia de quienes han estado estos años bebiendo de su mano. 
¿Alguien que quiere dar participación se rodea exclusivamente de su mujer, de su cuñada, del marido de la cuñada, de la novia y la madre del asesor, de la mujer y la hija  del diputado, o del Espíritu Santo? Y es que, para aquellos y aquellas que no dejan de repetir lo de las familias de Daoiz, no es lo mismo heredar la pasión por unas siglas y hacer historia socialista, de generación en generación,  que meter exclusivamente a tu propia familia.  
Y aunque nadie me crea, lo he intentado. Intenté poner de mi parte, comprender, empatizar. Siempre he sabido que en nuestro partido han existido diferencias entre personas, heridas sin curar, puertas entreabiertas, pero nunca ha dominado el desprecio, la ignorancia o el olvido. La lealtad,  que tanto se repite, no es adorar a un líder. La lealtad es dar sentido a unos principios, a un proyecto. Es saber contradecir, discrepar, y ceder. Es ser generoso o generosa, pero sobre todo es sumar con las diferencias. 
Nadie sobra.
Personalmente  jamás estaría en un proyecto liderado por Manuel Hernández, pero, ¿ de esas quinientas personas que ha dicho que hay en la radio, ninguna es merecedora de su confianza, salvo su familia? ¿Nadie de los que han estado estos últimos años, desde que se fundó el partido, merece estar en el Comité Regional? 
Supongo que no, cuando ni siquiera han sido merecedores de una invitación al Congreso. 
La democracia no es control y ésta últimamente está en juego. 
Sé que no va a dimitir, que se va a volver a excusar en sus mentiras y en su encaje teatral. Sé que ni siquiera va a tener la decencia de reconocerle los logros que el responsable de Ferraz le atribuyó a él a quien se lo tiene que otorgar, pero espero que, por lo menos, tenga el coraje de levantarse un día y saber que el PSOE no es un capricho individual. 
Espero que un día conciba que estas siglas no le pertenece, que detrás de ella hay muchos corazones que están sufriendo este devenir. Algunos de esos corazones tampoco se han entendido conmigo, por eso de adherirme o relacionarme con un Secretario General en concreto, pero sí los siento como míos porque esa es la grandeza del Partido Socialista. Pero que no pidan que me entienda con quienes nada más se han arrimado por un escaño, por cobrar un sueldo, o por seguir viviendo de un movimiento una vez agotado otros estamentos. 
Eso sí, espero que un día sepa que me podrá echar o abrir cuantos expedientes quiera, pero que detrás de su insolencia hay muchas personas de la calle que esperan que de verdad pongamos soluciones a sus problemas, gente que nos necesita y que no comprende que un Secretario General no cuente con las distintas esencias salvo la de su carnet de identidad.
Es más, le propongo un reto. 
Estoy dispuesta a cambiar mi ficha de afiliación, si es que el problema soy yo, con tal de que no siga dañando al partido, con tal de que ponga orden al desorden, con tal de que escuche y, sobre todo, con tal de que valore realmente el significado de la política.  
Una política que está premiando el insulto, el conmigo o sin mí. Aún suena como auténtico martillazos contra mis tímpanos dos nombres que se han encargado de atacarnos hasta unos límites intolerables y que ahora ocupan la organización y el Comité de Eticas. Golpistas, fachas, caricaturas impropias contra la Presidenta de la Junta de Andalucía o afirmaciones escritas de que dejarían el partido si ganaba Susana. 
Así no. La democracia, como dije al principio, está en juego, y Manuel Hernández está "barriendo" para él. Primera España y la gente, luego el psoe, y por último uno mismo. Él lo ha entendido al revés. 

viernes, 15 de septiembre de 2017

PALMEROS AL PALMERAL. EL CONGRESO DEL PSOE DE CEUTA ( Primera parte)

Hace poco me dijeron que las cosas se lavan en casa. Y yo me pregunto ¿ en qué casa?
La misma caso que despidió a un trabajador de manera improcedente, la que ha llamado a Ferraz para intentar echar a quienes lo han dado todo, mientras luego tiene un pacto con un partido que mantiene a su líder imputado. A la misma casa que censura notas de prensa de sus miembros. La misma casa que no ha celebrado en estos dos años ninguna asamblea o comité de los que se han requerido. 
Esa casa que vota las propuestas de un pleno según el pensamiento de una única persona, contradiciendo incluso nuestro propio programa electoral. Esa casa que ha englobado un censo de manera ilegal y completamente sucia. Y sí, sin miedo a volver a denunciarlo.
Esa casa que es capaz de venderse al mismo diablo y que ha olvidado qué significa realmente la palabra compañero y compañera. Esa casa que ya no recuerda lo que es el esfuerzo, la constancia, la ilusión, o la palabra equipo.
Aquella casa que deja los debates, las visitas a las barriadas, las comidas de navidad y entregas de medallas, los encuentros en la feria, o los premios como el María Miaja.
 Aquella casa que ha quitado de la web el portal de transparencia donde se publicaba los gastos y el presupuesto, las agendas, los documentos y nuestro código ético.
Aquella casa que permite que algunos diputados no cumplan con sus obligaciones y que ha cambiado la o de obrero por la c de convenio, la s de socialista por la t de tirano, la p de partido por la c de cuartel. 
Poco más tengo que decir a una etapa que termina y otra que empieza, una etapa a la que le deseo suerte, pero que no la siento como mía. No la reconozco. 
Y en esta ocasión, no podrá decir que ha sido elegido democráticamente porque ni siquiera ha tenido la valentía de someterse a una primarias al rechazar una candidatura que si la entregó en tiempo y en forma.
Ahora tendrán el control pero no podrán decir que tienen a un líder. 
Un buen líder es capaz de ganarse el respeto y jamas obliga a la sumisión.
Un líder aglutina, une y acepta las criticas. Un líder no calla a las Juventudes Socialistas o deja fuera a más de partido entero, no mandando invitación para el Congreso ni siquiera al Comité Regional saliente.
Espero no equivocarme, porque amo al PSOE de Ceuta, pero todo va a seguir igual, aunque a ellos les da igual.
Palmeros al palmeral.

sábado, 9 de septiembre de 2017

La vuelta al colegio…

Hoy me quiero acordar de todos los profesionales de la educación que vuelven, como pueden, a ocupar las aulas para invertir en la mayor fortaleza que tiene una sociedad, que es la educación.
No sé si es porque me toca, pero es muy decepcionante tener que escuchar a la gente hablar tan abiertamente de las vacaciones que tenemos los maestros y las maestras,  o que casi no gozamos de preparación. No hace falta que recuerde incluso algunas expresiones de dirigentes que nos han despreciado y que aún no han entendido cual es el pilar fundamental de un país, para que éste tenga futuro. 
Ya no estamos hablando del hecho de que vamos a formar a personas, de todos los sectores, que serán necesarias para que el mundo en sí funcione, sino que encima tenemos la virtud y el honor de poder enseñar a ser, con los valores de la igualdad y la libertad. ¿Existe alguna herramienta mejor que la de saber que tenemos la magia de convertir una sociedad en lo más digna y decente posible? A pesar de quienes se empeñan en lo contrario.
Y en Ceuta este esfuerzo se hace mayor, no únicamente por las características de nuestro entorno, sino porque somos el garbanzo negro de Madrid al que hay que rogar para que se acuerden de nosotros, para que nos doten, para que nos escuchen.
Por cierto ¿quién contabiliza las horas de preparación del material, la corrección de exámenes, los cursos de formación que son fuera del horario escolar, las coordinaciones, o el estrujamiento de la imaginación para no seguir los cánones marcados en una guía educativa?¿Quién se acuerda de quién tiene que mimar todos los días la paciencia, la empatía, la sensibilidad, para entender y adaptar  metodológicamente todo lo que hay que transmitir a quién luego nadie quiere? ¿Por qué no hablamos mejor del profesional que apenas duerme por la noche cada vez que piensa en la cara de ese alumno o alumna que lo está pasando mal? 
¿Quién se acuerda cuando sobrepasamos la ratio y damos clases por encima de nuestras posibilidades, o cuando no nos limitamos únicamente a nuestras funciones, sobre todo en la etapa de infantil o educación especia?
Y no, las escuelas no son empresas ni estamentos estancados. Con las escuelas no se hacen recortes, con las escuelas no se experimenta.
Mercadear con la educación es privatizar el pensamiento, es desahuciar la educación para la ciudadanía y la filosofía, es manipular.
Así que hoy, aquí, aprovecho para felicitar a mis compañeros y compañeras, para exigir más gasto público en la educación y, sobre todo, para que lancemos una campaña de prestigio a quienes sueñan y viven para la tiza, el papel y el lápiz.

lunes, 4 de septiembre de 2017

¿CEUTA TAMBIÉN ES UNA NACIÓN?

No pretendo con este artículo revivir mi impresión de lo que Pedro Sánchez, como Secretario General, ha hecho y pretende continuar haciendo. Tampoco, por ahora, voy a plasmar el sentimiento huérfano que tengo desde que Eduardo Madina decidiera abandonar la política, ni mucho menos voy a recalcar la decepción y tristeza que siento al ver secuestrado el PSOE de Ceuta.
A diferencia de quienes no dudaron en acribillarnos por hacer uso de la democracia representativa, le tengo un profundo respeto a la militancia y a lo que ésta decidió, pero eso no me limita poder opinar sobre aquello que creo que es mejor para mi partido, sobre todo para mi ciudad.
Jamás pensé que nos encontraríamos ahora debatiendo sobre el concepto de nación, mayormente porque soy consciente del trabajo que supuso llegar a un acuerdo que se plasmó en la Declaración de Granada, un acuerdo hecho desde el sentimiento cultural, desde la identidad, pero sobre todo desde la igualdad. Mucho menos creía que al final acabaríamos, con todo lo que realmente es necesario modificar, dudando del artículo dos de la Constitución.  
Demasiadas brechas abiertas que jamás desaparecerán por mucho que queramos ahora insertar el concepto de Estado Plurinacional. Un concepto que, hasta el momento, nadie se ha atrevido a definir y que lo único que hará es agravar más esta disparidad. 
¿Por qué? Porque todos los dirigentes del PSOE saben que el reconocimiento de nación no puede favorecer la diferencia entre la ciudadanía en función de dónde resida. Y claro, ¿ qué papel juega Ceuta? ¿Alguien se acordará de nosotros a la hora de delimitar las competencias de las diferentes Administraciones? ¿Si Madrid, como Comunidad Autónoma, puede ser una Nación, o todas las naciones son España, nosotros como Ciudad Autónoma seremos región dentro de una Nación? ¿ Micro Nación?
Todo esto irónicamente hablando, por supuesto. 
Para poner un poco en antecedente, voy a plasmar lo que intento incluir siempre en todos los documentos y que ya ha sido objeto de meditación.
“Nuestra singularidad por nuestra situación geográfica, la exclusión de la Unión Aduanera, nuestro Régimen Económico y Fiscal o nuestro Estatuto de Autonomía, hace necesario que se nos otorgue un tratamiento específico y estable. Necesitamos un acuerdo que garantice la estabilidad en el contexto geográfico y que ayude al desarrollo económico mediante una acción conjunta sobre los grandes temas que nos preocupan. Nadie duda de que hemos sido los promotores en el acuerdo de la Comisión Mixta Congreso-Senado para la Unión Europea, donde quedaron recogidas una serie de especificidades para Ceuta que tenemos que seguir trabajando, pero que hasta momento nadie ha querido socavar”.

Ahora, acabamos de vivir el Día de Ceuta y ha existido unanimidad a la hora de querer asumir más competencias. En mi caso, como docente,  siempre insisto en la educación, debido a que deciden por nosotros y ni siquiera tenemos asiento en la Conferencia Sectorial. Tampoco estamos en el Comité de las Regiones o, por poner un ejemplo más drástico, ni siquiera las personas enfermas de cáncer pueden darse radioterapia en nuestra ciudad, teniendo que cruzar el barco todos los días. Por eso, cuando escucho hablar de la igualdad territorial me hace gracia, mayormente en los momentos donde observo que existen documentos donde ni siquiera nos nombran. 
Además, ¿quién va deslindar este encaje? ¿El Grupo Parlamentario Socialista, la Comisión Ejecutiva Federal, el Comité Federal?
No sé, a veces creo que nos aferramos al poder con medidas que tienen un coste elevado. Y no podemos estar en una balanza sin equilibrio, mucho menos perder el norte y el sentido de lo que siempre hemos sido.
Se llama proyecto, se define sentido común.