CONDENAMOS EL ATENTADO DE ORLANDO Y LAMENTAMOS QUE NO SE HAYA PARADO LA CAMPAÑA

Desde Búscome mostramos nuestra repulsa y condenamos el atentado homófobo que ha tenido lugar en la discoteca Pulse de Orlando. Es un ataque contra la libertad y la igualdad, un delito de odio que no puede pasar inadvertido por nadie, mucho menos por las personas, colectivos, asociaciones y partidos que trabajamos todos los días por la diversidad”, afirma Búscome.
“Mostramos nuestras condolencias a los familiares y a las personas más allegadas de las víctimas y exigimos reflexión para aunar esfuerzos en la lucha contra la intolerancia y la discriminación. El terrorismo radical, extremista, machista, y homófobo necesita de una actuación coordinada, contundente e integral”, afirma Búscome.
En este sentido, Búscome considera que “ es un error no haber mostrado la solidaridad suficiente como para haber paralizado la campaña en el día de hoy. El masacre que se ha producido en Orlando no podía tener como respuesta la pasividad, ceguera y sordera de hacer que todo siga igual. Son momentos cruciales donde los gestos hacen mucho más que las palabras”.  
“Aunque ISIS ha reivindicado el atentado, todo sigue en proceso de investigación. Por eso, desde nuestra asociación también rechazamos los cruces de palabras y los debates centrados en quien motivó los asesinatos y no en el motivo de los mismos, todo es rotundamente condenable. Es un asalto a la libertad”, sentencia Búscome que también insta a que “ la Ciudad convoque un minuto de silencio, si es que no lo tienen previsto, porque todas las muertes duelen lo mismo”.
Por último, Búscome recalca que “ al igual que es necesario combatir el terrorismo producido por Daesh, la Unión Europea tiene la obligación de luchar contra toda discriminación en la definición y ejecución de sus acciones. Dicha obligación se concreta en las políticas globales existentes de lucha contra la discriminación por razón de sexo, de orientación sexual e identidad de género, puesto que hay datos estratégicos que demuestran la necesidad de una hoja de ruta”.
“El estudio sobre las personas LGBT publicado por la Agencia de los Derechos Fundamentales indica que un 47 % de las personas LGBT fue objeto de discriminación o acoso en el último año, dándose los índices más elevados de discriminación entre las lesbianas, con un 55 %, los jóvenes, con un 57 % y las personas LGBT más pobres, con un 52 %. Un 26 % fue objeto de agresiones o amenazas violentas debido a su orientación sexual o identidad de género. Únicamente un 10 % se sintió́ con suficiente seguridad para denunciar la discriminación a la policía, y solo un 22 % denunció casos de violencia o acoso. Un 32 % fue objeto de discriminación en el acceso a la vivienda, en el ámbito educativo o en el acceso a la atención sanitaria, los bienes o los servicios, y un 20 % fue objeto de discriminación en el empleo o el trabajo”, afina Búscome.
Búscome concluye que “ todo es una cadena que va desde las acciones y las políticas a favor de la inclusión, la tolerancia y la diversidad, pasando por el rechazo a quienes discriminan, y terminando por seguir intensificando el pacto contra el terrorismo. Recordemos que existen países donde se condena a muerte a las personas LGTB, por culpa del extremismo”.